Sabemos que este año será uno donde, por motivos de fuerza mayor, tendremos que celebrar las ocasiones especiales de una forma diferente y, será precisamente en estos momentos, donde explotemos ese potencial que cada uno de nosotros tiene, para ser recursivos y crear grandes momentos con cada pequeño detalle.
Por este motivo hoy, más que una receta, queremos recordarte que no es necesario invertir mucho tiempo o dinero para dar un gran regalo. Basta con poner amor en lo que hacemos, y con esa intención, lo que sea que obsequies, será inolvidable: un mensaje sincero, una carta inesperada, una conversación, un abrazo fuerte o un preparar un desayuno para sorprender a mamá o a quien desees hacer sentir especial.
Entonces, para celebrar esta próxima festividad, el día de madres, te proponemos un sencillo desayuno con una jalea casera que podrás elaborar con poco esfuerzo, ya sea que te encuentres junto a ella o sea la mamá de tus hijos. Si no estás junto a esa mamá especial para ti, dejar volar tu imaginación y acompáñala a pesar de la distancia en este día tan bonito.
Ingredientes:
- Pan tajado Repan, 2 rebanadas por porción.
- Fresas, moras, manzanas, piña o la fruta que prefieras, 1 1/2 taza.
- Azúcar, 1/4 taza
- Canela en astillas, 3
- Clavo de olor, 3 unidades
- Agua, 1/4 de taza
- Mantequilla, 1/2 cucharadita
- Dibujo, carta, flor, chocolate, o algún pequeño detalle.
- Amor, mucho.
Preparación
Lo primero, será preparar la jalea. Corta la fruta seleccionada en trozos pequeños. Colócala en una olla junto al agua, azúcar, clavos de olor y canela. Mezcla constantemente hasta reducir y tenga una consistencia más espesa. Puedes retirar los clavos y canela al terminar la preparación.
Con ayuda de un tenedor, tritura los trozos de fruta que observes de gran tamaño aún. Deja reposar hasta que esté a temperatura ambiente.
Aparte, toma dos rebanadas de pan y llévalas a la tostadora. En caso de no contar con una, puedes utilizar una sartén caliente y un poco de mantequilla para dorarlos.
Cuando las retires, en una de ellas, corta una pequeña ventana en el centro en forma de corazón, con un cuchillo afilado. Esparce un poco de mantequilla en ambas tostadas.
En la otra porción (la que está sin cortar) agrega la jalea y aplánala un poco para obtener una superficie más plana. Cubre con la tostada que tiene la ventana.
Sí lo deseas, puedes acompañar con unos huevos revueltos y la bebida favorita de mamá.
Y para terminar, lleva todos los regalos que tengas para este día, al lado de este desayuno para sorprender a mamá y llévaselo la cama, mientras escucha su música favorita a manera de serenata y comparten todo su amor.
¡Felíz día de las madres!